se avance en las investigaciones de los desaparecidos, los homicidios, los secuestros, la violación a los derechos humanos, y casos de violencia contra las mujeres.
Lo que se requiere es que se tenga una aplicación total de la justicia, apegada a la legalidad, y que se dignifique la institución.
La honorabilidad de los funcionarios que compongan la estructura de la procuraduría, tendrá que responder a la confianza que les otorgue el gobernador Miguel Ángel Yunes Linares, quien ha girado instrucciones para que se limpie la corporación y se saque a los malos funcionarios.
Se tiene que dejar la política ficción, y llevar a la institución de las palabras a los hechos.
Así que funcionarios desde fiscales de distrito, y funcionarios de todos los niveles, tendrán que redoblar esfuerzos.
Si la intención, es quedarse dentro de la procuraduría, tendrán que bajarle a la corrupción y a la simulación, que es el gran flagelo por el que ha atravesado esa dependencia.
Se tienen que dejar de pleitos estériles, y que verdaderamente, la procuraduría entre a trabajar en las estrategias de prevención, y mecanismos de estrategias, que permitan mejorar la seguridad y bajar los índices de criminalidad en el estado.
El nuevo fiscal, tiene el gran reto de alcanzar las expectativas creadas, de lograrlo, pasará a la historia como el fiscal, que represente el cambio verdadero en la aplicación de la justicia.
Esperamos que no haya indolencia, que se atiendan verdaderamente los problemas del estado en materia de justicia, y se castigue severamente, a quien lastima a los ciudadanos, y al mismo estado de derecho que debe mantener Veracruz. |