Mucho se ha dicho de esta enfermedad, pero en tanto no se lleguen a probar estos dichos, lo mejor es tomar todas las precauciones necesarias, sobre todo, para una población, como la de México, que se encuentra bastante vulnerable, no tan solo a estos problemas que han surgido recientemente, sino a muchos otros males que no ha logrado enfrentar.
Pero lo que sí resulta más peligroso, es que algunos gobernantes se quieran aprovechar de la aparición de este virus para mantener a la población bastante distraída de los problemas habituales de una nación y éste sería el caso de México, donde no hay, aparentemente, programas definidos para enfrentar este problema de salud, pues el mismo Presidente de la República, siente que este asunto del coronavirus le ha llegado justo en el momento que lo necesitaba, es decir, cuando el movimiento nacional de mujeres, cuando la inseguridad se vuelve cada día más difícil de controlar, cuando su popularidad ha descendido considerablemente y cuando muchos de los problemas nacionales están comenzando por ahogarlo.
En fin, que para algunos gobiernos, como el de México, específicamente, el coronavirus, sí resulta ser un verdadero distractor, cuando menos por el momento, en tanto pasa un poco la crisis política que su mandatario nacional, está viviendo. Con la presencia de este virus, a la cual no se le concede ninguna importancia en México, como que está sirviendo para que el gobierno federal y en algunas entidades, traten de ganar tiempo y ponerse nuevamente en condiciones de seguir manteniendo esta situación bastante delicada.
No hay que ir muy lejos para darse cuenta que las condiciones económicas de la nación son cada día más severas y que están reflejando, aún cuando el Presidente tenga otros datos, una importante vulnerabilidad, puesto que ya vimos como se ha elevado el costo del dólar, cuya paridad con el peso manifiesta que en verdad la economía nacional esta debilitada. El dinero, aunque lo hay, está guardado y no se libera para enfrentar los graves problemas de la economía nacional.
Quiérase o no, la pobreza se ha incrementado y otros asuntos de interés nacional se han agravado, pero por suerte el coronavirus ha venido a darle un respiro al Presidente, y a su equipo de colaboradores que ya no saben qué hacer, tanto que han informado que las fronteras del país no se cerrarán y que seguirán recibiéndose los vuelos internacionales sin que se tenga el cuidado necesario, ya que a decir de los representantes del sector salud, no existen fundamentos esencialmente probados para determinar que el virus es un peligro para los habitantes del territorio nacional.
Esperan tener al país totalmente enfermo para que se den cuenta que de verdad el coronavirus está afectando la salud de los mexicanos, es decir, no experimentan lo que ha estado sucediendo, por ejemplo, en Italia, donde no se tuvieron las precauciones necesarias para evitar la propagación, por lo que ahora se han visto en la necesidad de decretar la cuarentena, no para alguna zona en especial, sino para todo el país, lo que significa que ya es una verdadera preocupación, tanto para los gobernados, como para el mismo gobierno, que se enfrenta a una verdadera calamidad que pudiera costarle muchas vidas más y recursos económicos que no estaban disponibles para esta situación.
Al coronavirus hay que tomarlo con toda la seriedad del mundo y no esperar que sea, solamente, como se ha dicho mucho, un mero distractor de los grandes problemas del mundo, aunque para muchos, como es el caso de México, les haya caído como anillo al dedo, pues ya se ha visto que lo están utilizando como un distractor en tanto se recuperan del impacto del paro nacional de mujeres y de su alta peligrosidad política y social.
Por eso no le dan al virus la importancia que tiene.
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QUE HAY MUCHO DINERO.
DICE EL PRESIDENTE que México, se encuentra bastante blindado con los recursos que tiene para enfrentar cualquier situación delicada. Que tienen los recursos suficientes que respaldan una saludable economía, pero la verdad de las cosas es que la pobreza se ha incrementado, luego de los severos recortes que ha hecho la administración para ahorrar dinero, que si bien es posible que lo tengan, es tiempo de que lo liberen para procurar satisfacer las necesidades de los hospitales y la compra de las medicinas que están demandando los mexicanos, en general.
No se puede hablar de un país, económicamente saludable, si falta cubrir necesidades tan prioritarias como es la salud. Ahorrar en estos rubros es atentar en contra de la vida de grandes sectores de la población que en este momento, muy a pesar de los anuncios gubernamentales, están sufriendo por la escases de los medicamentos.
No se ve, por ninguna parte que todo el dinero ahorrado esté sirviendo para algo en especial, como es la salud y otros problemas nacionales que nacen, precisamente, de la falta de dinero, pues no hay, hasta ahora, que el gobierno se haya preocupado seriamente por los difíciles momentos que pasan en las zonas marginadas del país, donde la pobreza se ha hecho mucho más evidente que en otras partes, donde ni los programas sociales podrán solventar estas precarias condiciones.
Si de verdad el gobierno de México, tiene dinero suficiente, producto del ahorro que se ha implementado, entonces que se utilice para resolver las grandes carencias nacionales.
Es la hora de que la famosa austeridad republicana, comience a generar las primeras satisfacciones para los mexicanos, en general. De otra manera, se seguirá pensando que los ahorros tienen finalidad político electoral y de riqueza personal de los actuales protagonistas de la vida pública de México.
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PRECAVIDOS.
SE ASEGURA, principalmente, por quienes han venido siguiendo de cerca la actividad política y proceder de los actuales gobernantes, respecto de los grandes problemas de México, que tanto el Gobierno federal, a cargo de Andrés Manuel López Obrador, como en el Estado, bajo la conducción del Gobernador Cuitláhuac García Jiménez, han venido soslayando, debido a que posiblemente se encuentren preparando, desde ahora, la tranquilidad de su futuro.
Saben bien y así l o entienden, de la misma manera, que Morena, ya no representa fuerza alguna como para seguir sosteniendo a gobiernos posteriores, sino que ésta organización política, ha cumplido con el objetivo de llevarlos a sus respectivas posiciones, tendiendo, por lo tanto, a desaparecer.
Esta es una de las grandes razones para que nadie mueva un dedo para detener la delincuencia, donde han procurado, más que nada, perdonarlos por sus malas acciones y darles la oportunidad de que puedan hacer lo que les venga en gana. Lo mismo está sucediendo con todos los actores políticos que les antecedieron y que prometieron castigar.
A nadie están tocando ni tocarán mientras se encuentren al frente del poder, pues de esa manera, es como están previniendo que también sean respetados para cuando ya no tengan el poder que ahora los cubre con su manto. Así como ahora se hacen de la visa gorda, así también esperan que los futuros gobernantes los mantengan protegidos y que los mismos generadores de la violencia les agradezcan su total impunidad. Vaya, que en verdad, están siendo precavidos.
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Y MAÑANA, aquí nos encontraremos, si otra cosa no sucede.
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