Los candidatos ofrecen y prometen imposibles con tal de alcanzar la presidencia municipal, a sabiendas de que jamás podrán cumplir sus compromisos de campaña. Esto ocurre aquí y en China. Los ciudadanos fingen creerles.
Todos coinciden en los temas de inseguridad, corrupción y desempleo, entre otros.
Hasta ahora la batalla perece concentrarse entre Montano, Ana Miriam e Hipólito, con ventaja para el de MORENA. Veremos el comportamiento del electorado de aquí al 4 de junio.
A la candidata del PAN/PRD, le cobrarían factura por los empleados despedidos y recortes de sueldos en el gobierno estatal. En cambio, si la mayoría de los xalapeños considera que Miguel Ángel Yunes Linares se ha desempeñado bien durante estos primeros 6 meses como gobernador, la victoria recaerá en Ana Miriam Ferráez.
Montano brega cuesta arriba. La popularidad del PRI se encuentra en su nivel más bajo. Si lograra el triunfo, sería mérito indiscutible del candidato.
El que galopa a vara alzada es, ni más ni menos, Hipólito Rodríguez Herrero, que ganaría la alcaldía con mínima inversión, gracias a la figura avasallante de Andrés Manuel López Obrador, a quien mientras más duro atacan, más se fortalece.
Los demás candidatos difícilmente se aproximarán a los delanteros, aunque abrigan la remota esperanza de que ocurra un milagro. No lo dicen ellos, son palabras mías.
Esto en lo concerniente a Xalapa. En el resto del estado, la sorpresa también parece ser MORENA, con probabilidades de arrasar en por lo menos la mitad de los 212 municipios.
La disputa final es entre el gobernador Miguel Ángel Yunes y el presidente de MORENA y seguro candidato presidencial, Andrés Manuel López Obrador.
Hagan sus apuestas y a finales de este mes, tal como lo prometí, daré a conocer mi pronóstico para esta ciudad.
(Mi solidaridad con Oye Veracruz y su director general, Santos Solís Ríos). |